Empecé a leer este tipo de cómics desde los hechos de Civil War. Nunca había sido fanático de de Marvel ni de DC, pero una vez que un amigo me presentó uno de los capítulos del trepamuros impreso por una editorial nacional, recordé aquella serie de Spider-man que daban cuando era niño y que tanto adoraba. Rememoro entonces aquel conflicto personal de mi infancia entre querer aprender un kamehameha y el añorar ser picado por una araña radioactiva. ¡Lo que hubiese hecho si así hubiera sido!
He terminado los eventos de Back in Black, me he tragado el controvertido final de One More Day y la inmediata secuela Brand New Day. Desde ese punto he leído todo y disfrutado de los arcos de New Ways to Die, pasando por la saga de American Son y siguiendo con lo que ha sido The Gauntlet y SHED. Ok, sí, me he frikeado con esto. Y me gusta, rawr.
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Es en GRIM HUNT, cuando todos los sucesos vistos en las dos anteriores sagas me darán un (porque más vale que sea así) muy intenso clímax. Voy a empezar, entonces con este arco de la historia, el cual concentra el plan más largo, retorcido y sólido que he visto contra spidey. Si bien no quiero que el protagonista muera, más le vale sufrir mucho, ¡muchísimo! Todo sea por mi sano entretenimiento.
